La Franja de Gaza cumple dos años sumida en una devastación casi total, resultado de los incesantes bombardeos y operaciones militares israelíes iniciadas tras la escalada de violencia de 2023. Lo que comenzó como una ofensiva contra grupos armados palestinos se transformó en una crisis humanitaria sin precedentes en el enclave, donde más de dos millones de personas viven bajo condiciones extremas.
Barrios enteros han desaparecido del mapa. Las infraestructuras básicas —hospitales, escuelas, plantas de energía y sistemas de agua— quedaron reducidas a escombros. La falta de electricidad y combustible ha paralizado los servicios esenciales, mientras miles de familias sobreviven en refugios improvisados o entre las ruinas de sus antiguos hogares.
Según organismos humanitarios, la cifra de m