Tres revueltas en tres países africanos en un solo fin de semana no es una noticia habitual.
Primero, en Madagascar. La protesta juvenil iniciada a finales de septiembre como queja por los cortes constantes de agua y de luz y que ocupaba la Plaza del 13 de Mayo dio un salto cualitativo cuando la unidad militar de élite conocida como CAPSAT anunció que tomaba el control operativo del Ejército e instaló al general Démosthène Pikulas como nuevo jefe militar. El presidente malgache, Andry Rajoelina, denunció por segunda vez en una semana , mientras que la aerolínea Air France suspendió sus vuelos entre París y Antananarivo por motivos de seguridad. La ONU ha reportado al menos 22 fallecidos desde el inicio de la crisis, aunque es una cifra discutida por el Gobierno.
Segundo, en . Las ten