El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, ha amenazado con retener la asistencia esencial para la compra de alimentos hasta que se resuelva el cierre del Gobierno. Esta advertencia se produce a pesar de que su administración aseguró ante un tribunal que continuaría financiando beneficios parciales. En una publicación en Truth Social, Trump afirmó que los beneficios del Programa de Asistencia Nutricional Suplementaria (SNAP) “se entregarán solo cuando esos demócratas de la izquierda radical reabran el Gobierno, lo cual pueden hacer fácilmente, ¡y no antes!”. Esta declaración se da un día después de que el Gobierno anunciara que cumpliría con una orden judicial y utilizaría un fondo de contingencia de aproximadamente 5.000 millones de dólares para seguir pagando ayudas parciales hasta noviembre. Inicialmente, los funcionarios de Trump habían considerado suspender estas ayudas, citando dudas sobre la legalidad del uso del fondo de contingencia o la transferencia de fondos de otras cuentas. Sin embargo, el tribunal determinó que el Gobierno podía realizar ambas acciones para financiar completamente los más de 9.000 millones de dólares en ayudas. A pesar de esta decisión, los funcionarios optaron por utilizar únicamente el fondo de contingencia para cubrir las ayudas parciales, lo que ha generado preocupación entre los beneficiarios del programa. La situación actual ha llevado a un debate intenso sobre la responsabilidad del Gobierno y el impacto de las decisiones políticas en la vida de los ciudadanos que dependen de estas ayudas para su alimentación diaria.