El cierre del gobierno federal de Estados Unidos entró este miércoles en su día 36 , convirtiéndose oficialmente en el más largo de la historia . La parálisis, que comenzó el 1 de octubre por una disputa presupuestaria entre la Casa Blanca y el Congreso, ha dejado a cientos de miles de empleados sin cobrar, ha interrumpido programas sociales y ha provocado demoras en aeropuertos y servicios públicos en todo el país.

El presidente Donald Trump reconoció que el prolongado shutdown afectó al Partido Republicano en las elecciones del martes, en las que los demócratas obtuvieron victorias clave en varios estados. En un desayuno con senadores en la Casa Blanca, el mandatario pidió eliminar el filibuster, la regla que exige una mayoría de 60 votos en el Senado para aprobar la mayoría

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