Un terremoto de magnitud 4.0 en la escala de Richter ha despertado en la medianoche del lunes a numerosos vecinos en Álava , especialmente en Vitoria-Gasteiz , donde el temblor fue percibido con intensidad. El epicentro se localizó en la localidad de Iruña de Oca , según ha confirmado el Instituto Geográfico Nacional (IGN) , que también registró el sismo como un evento superficial , a cero kilómetros de profundidad.

El movimiento sísmico ocurrió exactamente a las 00:10 horas y se sintió en otras zonas del País Vasco , como Gipuzkoa y Bizkaia , así como en provincias limítrofes como Burgos , Navarra y La Rioja . En algunas estaciones sísmicas de Madrid también fue registrado. No se han producido daños personales ni materiales , más allá de algunas grietas menores.

Según el Gobierno Vasco , el Centro de Coordinación de Emergencias (SOS Deiak) recibió 143 llamadas relacionadas con el temblor, muchas de ellas provocadas por alertas automáticas emitidas por sistemas operativos de móviles.

Una sacudida breve pero intensa

La duración del temblor fue de apenas tres o cuatro segundos, pero su intensidad provocó que muchas personas se despertaran alarmadas. En barrios de Vitoria como Zabalgana , varios vecinos salieron a la calle por precaución. Objetos como lámparas y muebles se movieron visiblemente en numerosas viviendas. Algunos lo describieron como «dos explosiones seguidas».

En puntos como Uribarri y Otogoien , en Álava, la intensidad fue de nivel IV-V, mientras que en localidades como Logroño , Miranda de Ebro , Azkoitia o Villabona , el seísmo fue leve (nivel II), según la escala del IGN.

Llamamiento a la calma y sin réplicas previstas

Las autoridades locales, como la alcaldesa de Vitoria, Maider Etxebarria , y el diputado general de Álava, Ramiro González , han lanzado mensajes de tranquilidad , confirmando que no se prevén réplicas. El IGN ha habilitado un formulario de cuestionario macrosísmico para que los ciudadanos informen sobre cómo percibieron el seísmo.

Se trata del temblor más intenso en la zona en años, aunque sin consecuencias graves. El anterior precedente de magnitud similar se registró en Pamplona en 2019 con una intensidad de 4,1.