
La niña española de 14 años que fue violada junto al centro de menas de Hortaleza (Madrid) por un interno marroquí –fue detenido allí mismo acusado de la violación – fue arrastrada hasta unos matorrales del parque, golpeada contra un árbol, despojada de su ropa y agredida sexualmente. El violador la golpeó contra el suelo en repetidas ocasiones mientras la agarraba del cuello para impedir que gritara pidiendo ayuda. De hecho, los gritos que a duras penas logró lanzar la niña alertaron a una vecina que avisó a la Policía.
La brutal secuencia de hechos ha sido confirmada a OKDIARIO por fuentes directamente relacionadas con el caso y así consta en diligencias oficiales en las que se detallan aspectos de esa brutal violación. El suceso tuvo lugar en el Parque Clara Eugenia, junto al centro de acogida a menores extranjeros no acompañados (menas) y de la vivienda de la víctima.
La niña caminaba por el parque alrededor de las 23:00 cuando se cruzó con dos menas, uno de ellos conocido de una amiga. La víctima siguió su camino tras saludar al conocido, pero el segundo varón comenzó a seguirla y la abordó violentamente.
Golpeada contra un árbol
Las mismas fuentes han indicado que el atacante besó en la boca a la niña y la arrastró hasta una zona oscura de ese parque, donde acabó consumando la violación entre los gritos de la pequeña que él mismo intentó atajar agarrándole violentamente del cuello. Según los datos recabados por los investigadores, la niña fue golpeada contra un árbol y contra el suelo.
Ya en el lugar, el mena consumó la agresión sexual, desnudando a la niña, que intentó revolverse contra él a base de patadas, gritos y manotazos. La violencia que sufrió la pequeña fue evidente. Durante la violación, el atacante llegó a propinarle mordiscos, la golpeó y la zarandeó, según datos que constan en diligencias.
La agresión continuó durante unos minutos interminables hasta que se escucharon las sirenas de la Policía que acudían al lugar. Los agentes pusieron a salvo a la niña y en ese momento llegó la abuela de la menor alertada por los gritos.
Un equipo del SAMUR prestó atención médica y psicológica a la víctima en el lugar de los hechos. La niña fue trasladada posteriormente a un hospital madrileño próximo donde se le hizo un examen a conciencia.
El mena usaba 3 identidades falsas
Los agentes consiguieron averiguar que el presunto autor de la violación era uno de los internos del centro de acogida a menores.
El detenido, ya en un centro cerrado para menores por orden judicial, es un joven de 17 años, marroquí, con antecedentes por otros delitos y que, según fuente judiciales, usaba tres identidades falsas para cometer sus fechorías.